Cómo animar vectores en Fusion

En el último vídeo del canal te desvelo uno de los secretos mejor guardados de DaVinci Resolve: podemos trabajar con imágenes vectoriales en Fusion y animarlas a nuestro antojo. Y, como casi, casi siempre, también lo podemos hacer en la versión gratuita del programa, por si creías que aún quedaba alguna limitación a tu creatividad sin rascarte el bolsillo.

Qué son los vectores

A la hora de mostrar imágenes, lo más habitual es hacerlo de dos formas: mediante mapas de bits o mediante vectores. Los mapas de bits son las clásicas imágenes, en JPG, PNG u otro formato similar, compuestas de píxeles, que son esos cuadraditos que vemos cuando ampliamos mucho la imagen.

Las imágenes vectoriales, por su parte, no son mapas de bits, sino coordenadas matemáticas que van de un punto A a un punto B siguiendo una curva o no. Combinando muchas de estas coordenadas, generamos trazos que crean formas geométricas complejas o incluso fotografías “vectorizadas” (convertidas en curvas) según el grado de complejidad que queramos aplicar o que nos permita el programa de diseño gráfico que usemos, si este dispone de modos automáticos.

¿Y cuál es la ventaja de esto? Pues que los vectores mantienen exactamente la misma calidad (no se ven los píxeles) cuando ampliamos la imagen, permitiendo trabajar con cualquier resolución que queramos. Por cierto, los vectores son muy útiles también para evitar uno de los mayores quebraderos de cabeza de los diseñadores, las tipografías. Los programas compatibles son capaces de convertir el texto a curvas (vectores, sin ir más lejos) para tener siempre los textos disponibles y evitar errores de visualización y adaptación a otros tamaños.

Cómo importar vectores en Fusion

Lo único que tenemos que hacer es abrir nuestro programa de diseño gráfico favorito que sea compatible con imágenes vectoriales. Adobe Illustrator, Affinity Designer, Affinity Photo o Inkscape permiten generar, editar y guardar estas formas. ¡Y, por supuesto, Inkscape es gratuito!

Luego, generamos la forma que queramos y la guardamos en un archivo SVG, un estándar para este cometido. Truco del almendruco: lo ideal es que el lienzo donde generemos la imagen tenga el tamaño del fotograma de nuestro vídeo. En el caso de Affinity Photo, que es el que suelo utilizar, creo un nuevo archivo a una resolución de, por ejemplo, 1920×1080 píxeles y ahí inserto (o edito) las formas geométricas que yo quiera.

Luego, abrimos el módulo de Fusion y nos vamos al menú Fusion, Import, SVG. Seleccionamos la forma, le damos un tamaño por defecto (recomiendo dejarlo si ya lo tenía asignado de antes) ¡y ya lo tenemos!

Y ahora te preguntarás, ¿y por qué no genero las formas directamente en Fusion? Porque los programas de diseño gráfico, al estar dirigidas lógicamente a este cometido, disponen de herramientas mucho más avanzadas para crear formas geométricas que luego se pueden guardar en este formatos como SVG para su posterior tratamiento en programas de edición de vídeo. Por ejemplo, generar una estrella en Fusion es poco menos que una tortura, mientras que en Affinity Photo me suponen dos clics de ratón y menos de 3 segundos.

Además, fíjate que cuando importas las formas, se importan las “capas” de las que consta la imagen original (colores de relleno u otras formas) pero en forma de nodos agrupados, ideal para “despiezar” esa forma importada o editarla a nuestro antojo.

Una vez importado el vector, podemos aplicar los parámetros que queramos a cada nodo de Path, fondo o de mezcla, por ejemplo para cambiar el tamaño o incluso la forma, ya que, al ser vectores, son perfectamente editables. Por supuesto, estos parámetros aplicados a vectores son compatibles también con fotogramas clave